El Núcleo
Duruelo
de La Sierra, Covaleda
y Salduero, son las tres localidades de la provincia
de Soria que tienen
el honor de enfilar las aguas del río Duero hacia la capital machadiana.
El pequeño pero recoleto municipio
de Salduero, se encuentra
en una encrucijada de caminos, en la carretera de la Consejería de Fomento de la Junta de Castilla y León CL-117
(antes S0-850, a una distancia de nueve (9) kilómetros de Covaleda y cuarenta (40) kilómetros
de Soria capi tal, y en la margen izquierda de las aguas del río. Para saltar
el cauce, ya va tomando anchura, las gentes de Salduero
se sirven de seis arcos de piedra
que forma su Puente.
El núcleo principal, reducido y de forma triangular, se dispone entre el Río y la carretera y es
un conjunto valioso, con plaza y crucero
de arquitectura popular, disponiendo
de un Centro de Interpretación de Pinares
y un museo dedicado
al pintor M. Peña. Ya en el siglo XII esta localidad tuvo su importancia con los monjes
benedictinos.
El
Puente
El largo Puente de piedra de Salduero, sobre el ancho cauce del río Duero,
está compuesto por seis arcos rebajados, de aproximadamente 8 metros de luz, siendo
la longitud total del puente
de sesenta metros. Las bóvedas están formadas por una perfecta
sillería colocada a tizón, siendo la
clave de los arcos tangente a la imposta,
de la que salen unas pequeñas gárgolas
que, teóricamente, sirven para evacuar el
agua del pavimento de la calzada. Las pilas disponen, aguas arriba, de pequeños tajamares de planta triangular, que no llegan hasta la imposta.
El pretil
lo forman dos hiladas
rectas, de 40 centímetros
de espesor cada una, de grandes sillares, rematados con paramentos, también de piedra
caliza. Los estribos, alargados,
lo forman una buena fábrica de mampostería careada, con remate en la parte superior. Es bello y hermoso el Puente de Salduero. El entorno, juntamente con las casas del pueblo más
próximas no es despreciable, por eso el puente tampoco ha de serlo.
El paisaje urbano
Se trata de un conjunto
rural de gran valor paisajístico al existir un escenario equilibrado de elementos (río y Puente, perfil urbano y fondo de montañas
y arbolado), colores
y textura en las tonalidades de piedra, madera, marrones
de fondo y vegetación, volumetría
(conjunto arquitectónico de piedra
y entramado y cubiertas inclinadas), si bien se percibe una edificación
de mayor volumetría adosada
al núcleo pero adaptada a él.
En esta población se haría realidad
el dicho de aquellos
pueblos que parecen
emerger de la tierra, fundiéndose con ella en perfecta armonía.
La vista desde el núcleo,
al otro lado del río nos hace ver que no ha sido necesario el
crecimiento en esta margen, y solo la ermita a media ladera y con un fondo de pinares como es lógico en esta zona, conforman una imagen idílica.
En cuanto a la edificación que figura como detalle
podemos observar los materiales empleados en mampostería de piedra en planta primera,
entramado de madera en disposición vertical y pequeños huecos sin orden de composición, en base a la funcionalidad de los espacios interiores, y el muro exterior de piedra sin mortero de sujeción, conforman una imagen característica de la arquitectura pinariega Soriana.
La nieve caída en esos días, y el ambiente nebuloso
existente (viaje realizado en Febrero de este año 2006) completan
unas imágenes singulares de gran valor paisajístico.
El paisaje urbano del Duero (Agua, Puente y perfil urbano)
Celestino Candela Pi; José María Fraile, Torcuato Cortés de la
Rosa
Muy chulas fotos con el nieve! El pueblo es muy bonito y el puente de grande belleza!
ResponderEliminarun abrazo