En principio fue la “Aceña del Muradal”,
más tarde la fábrica de harinas “El Sur” y en estos momentos el “Casino del
Tormes”. Si te acercas a este edificio y no tienes intención de jugarte los
cuartos, comer o tomarte una copa, puedes visitar el Museo Molino (se puede
solicitar una visita guiada). Con buen acierto se ha mantenido la zona dedicada
a la transformación del trigo para que pueda conocerse el proceso completo.
Sasores, plansichter, recolectores de polvo, molinos de cilindros, cribas…
Poleas y engranajes que aprovechan y distribuyen la fuerza generada por el
agua. Viaje del trigo por los diferentes pisos, arriba y abajo, hasta conseguir
la calidad de harina requerida. Una vez que la electricidad ganó la batalla
estos edificios perdieron su función y los que no se han reconvertido en otro
tipo de establecimiento se encuentran abandonados y en ruinas.
Precioso reportaje, enhorabuena.
ResponderEliminarInteresante me gusta el paisaje invernal, con los reflejos...felicidades
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