lunes, 7 de marzo de 2011

Un paseo por el río Tormes

Para satisfacer nuestras necesidades de contacto con la naturaleza propongo una solución fácil y cómoda, un paseo por la ribera del río a su paso por Salamanca. El trayecto discurre entre el Puente Romano hasta el Puente de la Serna. Es un itinerario bastante utilizado por lo que podíamos llamar la ruta del colesterol y además, se encuentra invadido por el carril bici.
Podemos encontrar un amplio patrimonio, desde lo que podemos considerar como el monumento más antiguo de la ciudad, el Verraco del Puente, hasta el más moderno de los puentes, el de la Serna. Hay varias construcciones relacionadas con el agua como la fábrica de harinas reconvertida en casino con su museo. Algunas no son más que meras ruinas como la aceña que hay junto al Puente del Pradillo o los restos de las ubicaciones de las norias que abastecían de agua a la ciudad.
Pero lo que nos sorprenderá será la abundante naturaleza que podemos observar a nuestro alrededor. En algunos sitios el bosque de ribera se encuentra en buen estado con un arbolado variado. La avifauna es numerosa pudiendo ver sin mayor esfuerzo más de veinte especies. Si somos más pacientes y nos ayudamos de unos prismáticos podremos observar muchas más.
Lastima que no valoremos el río en su justa medida y lo convirtamos en un basurero en el que podemos encontrar hasta los carritos de los supermercados. Es muy fácil después echarle la culpa al ayuntamiento o a la confederación del Duero por no limpiar. “No es más limpio el que más limpia, sino el que menos ensucia”.







2 comentarios:

  1. tienes toda la razón,si no fuéramos tan guarros las cosas estarían mejor

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  2. Bien utilizado el dicho popular que ultimamente muy pocas personas emplean y que bien estaría ponerle de moda, de nuevo.
    Un saludo de 'Ojolince y Sra.'

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