Encontramos esta planta de la
familia de las Cucurbitáceas tapizando algunas zonas inclinadas cerca del río
Tormes, en Salamanca. Presenta unas pequeñas flores amarillas que más tarde se
transformaran en una especie de pepinillo verde y rugoso. Pero lo más interesante
es su sistema de dispersión de las semillas. Los pepinillos se encuentran al
final de un largo y fino tallo. Cuando rozamos el extremo del fruto (o lo hace
cualquier animal) este estalla, lanzando las semillas a gran distancia,
facilitando así su dispersión.
Bonitas fotos. Nunca olvidaré el susto que me dí la primera vez que toqué esta planta y lanzó sus semillas al aire como proyectiles. No sé si será cierto, pero según creo, sus semillas pueden causar daños en los ojos .
ResponderEliminarSaludos
Muy buenas imágenes, a mi no me han saltado al ojo, que si debe de doler, pero el liquido me llego a la nuca, menos mal que no es ácido que si no luciría una bonita calva, por otra parte he fotografiado una especie de mariquita marrón y sus larvas en ellas.
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