sábado, 16 de abril de 2011

Una de ranas

En estos días de primavera proliferan las convocatorias de masivas excursiones de senderismo. Yo me pregunto que sentido tiene apuntarse a alguna de ellas. ¿Para qué salimos al campo? Mi interés es la observación de la naturaleza y ampliar mis conocimientos sobre ella. Para ello hay que desarrollar el poder de observación, fijarse en los diferentes detalles por pequeños que sean.
¿Pero, se puede hacer esto con dos mil personas a tu alrededor? Yo creo que no. No podremos ver como una simple rana dedica impasible su tiempo a la captura de algún insecto.


Menos aun podremos dedicarle el tiempo y la atención necesaria para comprobar que la rana, en su intento de pasar desapercibida, permanecerá inmóvil incluso cuando una pequeña araña se pasea por encima de su ojo. Podríamos decir que “ni pestañea”.


2 comentarios:

  1. Fantástica, desde luego esas 2000 personas no se hubieran fijado en la rana pero menos en su huésped, en un curso de niños pasamos entre dos palos unas 25 personas entre niños y adultos para hacer un recorrido por el campo en el palo derecho había una mantis que casi todos casi aplastan pero que ninguno vio, la verdad es que no se fijan en nada, por eso he creado el grupo de I.N.I.C.E. fotografía para que gente afín podamos ver y pasarlo bien con nuestra afición, además de un concurso que llamamos Bota-Foto que es por el campo y sin el estrés de que alguien te diga "ya esta el pesao ese haciendo fotos, el que siempre nos retrasa". No comprendo como se pueden hacer 15 o 20 kilómetros sin ni siquiera parar para ver el paisaje que tienes por todos los lado solo mirando al suelo para no tropezar, serán imbéciles, eso si al menos esperemos que no tiren las envolturas de las barritas energéticas y demás.

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