También es conocida como
berenjena del diablo. Originaria de América del Sur es frecuente en terrenos
agrícolas abandonados y en barbechos. Conocida y famosa por sus efectos
alucinógenos que supieron aprovechar las brujas en sus aquelarres. Pero
cuidado, es una planta muy peligrosa. Los síntomas de la intoxicación son según
Horst Altamann en su guía de plantas venenosas: desazón y excitación general,
ansia de hablar, llanto espasmódico, euforia, fuerte ansia motriz, espasmos agitantes,
alucinaciones, ataxia, aumento del estado de excitación, respiración más
profunda y acelerada, palpitaciones cardíacas, pulso rápido y elevación de la
presión sanguínea, pupilas dilatadas y fijas, trastornos visuales y del habla;
piel enrojecida, seca y caliente, temperatura elevada. De vez en cuando se dan
casos de muertes al hacer uso de esta planta jóvenes que han oído hablar de sus
efectos. Fumar sus hojas o consumirlas en infusión puede acarrear consecuencias
fatales. Es mejor divertirse conservando todas nuestras facultades, sin tener
que depender de ningún tipo de sustancia.
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