Sin duda es el pueblo que más me
gusta de Salamanca. Puerta de la sierra y lugar de encuentro de montañeros. Conserva
su estructura y su arquitectura popular a pesar de haber perdido en gran parte
su función. Su vocación turística viene de lejos por lo que las modas de lo “rural”
no le han afectado mucho.
Estoy de acuerdo, este pasado verano estuve por allí y me impactó especialmente. Te felicito por tus imágenes, creo que has sabido captar la esencia.
ResponderEliminarUn saludo