domingo, 16 de junio de 2013

Una mañana en la charca



El día comienza caluroso. Pensamos pasar la mañana en una charca, al lado de una población salmantina, para hacer fotos de algún zampullín. No están dispuestos y deciden no acercarse lo suficiente. Entre tanto las fochas se dedican a pasear a sus polluelos y darles de comer. Los gorriones revolotean por las orillas buscando comida entre la escasa vegetación. Lavanderas boyeras y cigüeñuelas nos hacen una visita. Todo bajo la atenta mirada de un mochuelo que nos vigila desde lo alto de la espadaña de una ermita cercana. Habrá que intentarlo otro día.




























martes, 11 de junio de 2013

La Vega de Amatos 3



Si hay algo de especial en los espacios naturales es la capacidad de sorprender. Por mucho que los visites y que los conozcas siempre te pueden ofrecer matices o sensaciones diferentes. En esta ocasión una intensa floración de viborera tiñe este espacio de morado.




La conservación de espacios como éste, requieren de una fuerte intervención humana. Sin la dedicación a la ganadería extensiva la vegetación se adueñaría del paisaje y desaparecería lo que conocemos como dehesa. Un punto importante para el manejo de los animales son las charcas y zonas húmedas que contribuyen a aumentar la diversidad.




Años atrás, la finca alimentaba a un nutrido grupo de vacas moruchas. En la actualidad hay una mezcla de retintas extremeñas y avileñas. El cerdo ibérico está presente pero de forma estabulada. Las gallinas complementa el conjunto.




























sábado, 8 de junio de 2013

Puerto de Béjar



Haciendo honor a su nombre, este pueblo se encuentra en el paso que ofrece la Sierra entre Salamanca y Cáceres, en plena Ruta de la Plata. Aun podemos disfrutar de la arquitectura característica de esta zona montañosa. Restos de la Calzada Romana, el Jardín del Duque y un esplendido paisaje, son otros de los atractivos que bien merecen una visita.




PUERTO DE BEJAR o DE BAÑOS: l. con ayunt. en la prov. De Salamanca (9 leg.), part. jud. de Béjar (1 ½)), dióc. De Plasencia (8), aud. terr. de Valadolid (35 ½), y c. g. de Castilla la Vieja. sit. en terreno montuoso con clima algo frío, siendo las tercianas las enfermedades más comunes. Se compone de 200 casas de mediana construcción, entre ellas la del ayunt. en donde está la cárcel; una escuela de instrucción pública concurrida por 80 niños de ambos sexos; 2 fuentes dentro de la pobl. de buenas aguas; igl. parr. (Ntra. Sra de la Asunción) servida por un cura de concurso y provisión ordinaria; una ermita con la advocación del Cristo de la Piedad y un cementerio que en nada perjudica a la salud pública. Confina el térm. por el N. con el de Balbuena; E. Garganta; S. Cantagallo, y O. Baños. Le cruza el r. Cuerpo de Hombre. El terreno es escabroso pero bueno para verduras; tiene un monte de castaños propio de común. caminos: el de Salamanca a Extremadura y a los pueblos inmediatos. El correo se recibe de Béjar. prod.: castañas, uvas, de todas frutas y cereales, aunque en corta cantidad; hay ganado vacuno y cerdoso y caza de conejos y perdices. ind.: la agrícola y mucha arriería que conducen géneros del país y ultramarinos. pobl.: 162 vec., 587 almas. riqueza imp.: 83,855 rs. El presupuesto municipal asciende a 2,500 rs., los cuales se cubren con el producto de propios y los abastos y el déficit por reparto vecinal.”
Pascual Madoz (1848-1850)
Diccionario Geográfico-Estadístico- Histórico de Salamanca


























domingo, 2 de junio de 2013

Lavandera boyera (Motacilla flava)



Pajarillo de unos  quince centímetros, con las partes inferiores amarillas y las superiores gris verdoso. Tiene la cola más corta que otras lavanderas. Hay una gran diversidad de plumajes, ya que unido a los propios de las diferentes edades y sexos, hay que añadir los de las distintas subespecies. En Europa hay al menos ocho subespecies que además pueden hibridarse. La más común en España es la iberiae. Siendo un ave migradora nos vista en verano. Podemos verla en terrenos abiertos cerca de alguna charca o curso de agua.

Su nombre se debe a que acompañaban a las mujeres en las tareas de lavado de la ropa, en las orillas de los ríos. Su comportamiento, de subir y bajar la cabeza constantemente, se podría semejar a la actividad de estas mujeres, frotando la ropa sobre la tabla de lavar.